Los efectos psicológicos positivos del Heavy Metal

“El heavy metal y la alienación adolescente” o “Control social y delincuencia” son algunos de los títulos que encontramos cuando buscamos literatura científica sobre la psicología y el heavy metal. Hay que reconocer que históricamente, las investigaciones nunca miraron con buenos ojos este estilo de música, e intentaron parecer un artículo de opinión más que una investigación objetiva. En estos estudios suelen hablar de la conexión que hay entre la música heavy y la alienación adolescente, los comportamientos autodestructivos, autolesiones o incluso el suicidio. Pero ¿Cuántos de estos investigadores escucharon heavy metal en su adolescencia?¿Cuántos fueron a sus conciertos?¿Cuántos se tomaron el tiempo de entender la cultura que rodea al heavy metal?

En los últimos años comenzaron a llevarse a cabo nuevos estudios sobre la “población heavy” cuyos resultados contradicen a los obtenidos en los estudios clásicos. Por ejemplo en 2009, investigadores de la Universidad de Monpellier y de la Universidad Estatal de California evaluaron a 333 fans de la música metal encontrando niveles de ansiedad y depresión similares o inferiores a la media. De hecho menos del 5% de los evaluados mostró síntomas patológicos.

La mayor crítica que se realiza a las investigaciones clásicas por parte las personas que pertenecen a la cultura heavy, es que se centran sistemática y exclusivamente en buscar aspectos negativos, mientras que no se preocupan por los efectos psicológicos positivos de aquellas personas que escuchan heavy metal y no por ello dejan de socializar.

En 2016, investigadoras de la Universidad de Nottingham y la Universidad De Montfort se basaron en su propia experiencia en el mundo del heavy metal para realizar un estudio sobre sus efectos positivos. En las charlas con sus amigos o en los conciertos se dieron cuenta que muchas personas del entorno coincidían en que, contrariamente a los que decían los estudios, era el metal  lo que los ayudaba a salir adelante. Contaban como era esta música lo que los ayudaba a evitar la depresión y les permitía expresar sus emociones negativas.

A través del análisis de las letras de las canciones, y en relación con las opiniones que habían obtenido, las investigadoras identificaron a la catarsis como el mecanismo principal de los efectos psicológicos positivos del heavy metal. El contenido dramático de las letras y los cambios rápidos del ritmo de las canciones era justamente lo que los adolescentes identificaban como la característica de este género musical que les reducía el estrés. Las canciones, que pueden ser vistas como negativas, pueden producir sentimientos de alivio en el sentido de identificarse con aquella persona que se sintió de ese modo particular y no solo lo superó sino que pudo expresarlo de manera creativa. Y junto con la catarsis, esta segunda ola de investigación sobre los efectos psicológicos del metal apunta a la solidaridad, a experimentar y expresar emociones fuertes, lo que hace que los seguidores de este género se sientan menos solos.

Para los que disfrutamos del heavy metal esto no nos llama la atención. La comunidad heavy se encuentra en todos los países, en diferentes culturas y a pesar de que exteriormente puede parecer violento o tétrico, la realidad es que suelen ser grupos muy amables y solidarios. En el día de la música desde Psicología para todos queríamos alejarnos del cliché de poner autores clásicos o de jazz, y reivindicar un estilo de música que nos gusta mucho. El año que viene lo haremos sobre el reggaeton.

Fuentes:

• Baker, C. & Brown, B. J Med Humanit (2016) 37: 1. doi:10.1007/s10912-014-9274-8
• Recours, R., Aussaguel, F. & Trujillo, N. Cult Med Psychiatry (2009) 33: 473. doi:10.1007/s11013-009-9138-2
• The positive psychology of metal music. The Smart set. Recuperado el 17 de Noviembre, 2016 de http://thesmartset.com/the-positive-psychology-of-metal-music/